2. Entre frontal y frontal debemos dejar al menos un metro de ancho para no agobiar el espacio y dejar que las puertas se abran sin problemas. Al mismo tiempo, si tenemos una forma rectangular muy marcada, lo mejor es decantarnos por un sólo frente de trabajo.
3. A la hora de comenzar la reforma, podemos elegir diferentes colores o tipos de azulejos para separar las zonas. Si contamos con una cocina grande podemos poner azulejos neutros en la zona de trabajo y algo más colorido en el office.


5. La cocina es una zona que siempre recibe mucha suciedad, algunas precauciones como poner muebles que se limpien con facilidad (las imitaciones de laca son fáciles de mantener perfectas), encimeras con poco mantenimiento como las de cuarzo compacto y electrodomésticos con sistemas anti huellas o hornos pirolíticos.
6. Otro punto es elegir un grifo con manguera. Aunque son un poco más costosos nos ayudarán a la hora de limpiar las piezas de menaje más grandes (como las bandejas de horno).


8. Las últimas tendencias han puesto muy de moda las cocinas minimalistas sin tiradores. Aunque este tipo de diseños queda genial, tenemos que tener en cuenta que son mucho más sucios y manchan los límites de las gavetas y cajones.


9. A la hora de maximizar el espacio podemos optar por cajones interiores que nos permiten aprovechar el espacio de cada mueble al máximo sin necesidad de influir en el diseño exterior. También podemos usar separadores de cajones para tenerlo todo perfectamente ordenado.
10. Por último, nuestros seguidores destacan la necesidad de buscar un espacio para el office. Si no tenemos mucho espacio, podemos sustituir esta zona por una barra de desayunos
Fuente: Autor: Esther Ruiz